Este segundo paso es el de utilizar los datos que ya tienes sobre tu base de leads, y defines la puntuación con hacer una buena clasificación. Pero ahí va una sugerencia importante: para tener un lead scoring completo, es necesario dividir tu evaluación en dos tipos de datos principales, los demográficos y comportamentales.
¿En que se basan estos datos?
Los datos demográficos se basan en información como edad, renta y cargo que ocupa. En otras palabras, es el perfil del lead. Es más factible tener la descripción de tu persona.
Los datos conductuales son aquellas preguntas basadas en datos de interés sobre el lead, ¿ha bajado algún contenido importante? ¿Cuánto el lead interactúa con tu empresa?
Juntando los datos demográficos y conductuales, la puntuación será más precisa y equilibrada.
Ten en cuenta que de nada sirve tener al lead con el mejor perfil pero con tener cero de interés, no se encaja en el perfil ideal. Es importante que esa decisión sea tomada en conjunto por los equipos de marketing y ventas, para evitar problemas a futuro.